10 abril 2006

Los 67 mil

Alan García continúa aumentando levemente su ventaja sobre Lourdes Flores.

El informe de la ONPE -actualizado hasta el 80,68%- señala que Humala obtiene el 30,24 % de votos válidos, seguido por García con 24,93 %.

Lourdes Flores está tercera posición con 24,03%. La diferencia entre ambos es de 67600, según registra El Comercio.

Cuando el escrutinio estaba al 70.8%, Flores superaba a García por 0,31%. En un perfecto ejemplo de cómo ven el Perú, los partidarios de Lourdes Flores maldicen el voto rural y depositan todas sus esperanzas en los votos de los peruanos que viven en el extranjero.

10 Comentarios:

Blogger Andrés Ricardo dijo...

Todavía no es seguro los resultados, falta contabilizar el voto del extranjero, por ello es que la ONPE ha dicho que en aproximadamente en 20 días darán el resultado final.

11:46 p. m.  
Anonymous Anónimo dijo...

La diferencia actual es de 91,608 votos, la diferencia de votos entre Lourdes y Alan en el extranjero es de 86,234 votos (Xavier Barrón dixit), tambien hay un número apreciable de actas observadas, por lo que con un poco de "wishful thinking" todavía podrían haber cambios en el orden de los candidatos.

Seguramente la tensión se mantendrá hasta despues de semana santa, pero es cierto que las chances de Lulu se hacen cada vez mas pequeñas.

11:52 p. m.  
Anonymous Anónimo dijo...

ya fuiste gordis... ya no la haces.

aunque entre impugnaciones y peleas, las caras de sufrimiento de la gorda y mr frontón prometen unos 20 días más de placer para nosotros los mortales.

y despues de esos 20 días ... será que los compañeros con los señoritos se sacarán la mugre y se odiaran a muerte el uno al otro?? como quedaran los animos de las huestes de ambos despues de este suplicio? votaran los unos por los otros??? tataaannnn...

1:00 a. m.  
Anonymous Anónimo dijo...

se que esta un poco largo, pero me parece interesante este articulo de raul wiener...

Montesinismo

El número de personas bien leídas e instruidas que son capaces de dar crédito a la idiotez de que el levantamiento de Locumba respondió a un plan para distraer la atención de los guardacostas del Callao, para que Vladimiro Montesinos pudiera huir hasta alta mar a bordo del yate Karisma, me ha hecho pensar que tal vez la oclocracia de Aldo M. se este desarrollando al revés.

Pero no llego a tanto. Mi opinión es que los que se tragan este sapo lo hacen porque tienen necesidad de reinterpretar la historia reciente y sobrevivir en el intento. A estas alturas se puede decir cualquier cosa y unos van a creerlo hasta la última letra y otros simplemente no le harán caso solamente porque saben de donde viene.

Es obvio que Vladimiro no necesitaba cortinas de humo cuando se movía de cuartel en cuartel protegido por sus compadres militares. En esos días finales del fujimorato ciertamente se superpusieron muchos hechos, como parte de una descomposición general. Pero el problema que estaba en el centro de la situación nacional no era el paradero del Doc., sino la negociación que se desarrollaba, miti-miti, entre la representación del gobierno y la de los partidos de oposición que son lo mismos que están presentes en estas elecciones.

Locumba, y las marchas y demás manifestaciones de protesta que ocurrían en las calles, expresaron la desconfianza que el país tenía a eso que llamaban “transición” y que se realizaba bajo la batuta de la misma OEA, que ocho años antes ayudo a legitimar el golpe de Fujimori y a la que también capitularon los partidos políticos. Ese era el meollo de la cuestión y el fondo de las distancias que desde el principio diferenciaron la actitud de los insurgentes con los autoproclamados héroes de nuestra democracia.

Quién lea de nuevo el Manifiesto del 29 de octubre del 2000, verá que era imposible que tal cosa saliera de la cabeza de Montesinos y los montesinistas, no sólo por la denuncia encendida del régimen, de la corrupción y de la degradación de los institutos armados, sino por el abierto llamamiento a la desobediencia de los mandos intermedios y bajos para fundar un nuevo ejército. A nadie se le ha ocurrido interrogar al comandante sobre cuánto mantiene de sus posiciones de hace cinco años y medio.

De hecho el levantamiento marcaba el final de uno de los mitos claves del sistema de los 90, que era que Fujimori había logrado a través del asesor controlar férreamente a las fuerzas armadas y adelantarse a las disidencias. Por eso Salinas cayó antes de mover una sola pieza de su intento de golpe reconstitucionalizador. Y Robles tuvo que hacer su valiente denuncia luego de haber buscado refugio diplomático para él y su familia. En ambos casos, la institución cerró filas con Hermoza y Montesinos y aisló la rebeldía totalmente.

Pero en el 2000 las condiciones eran otras. Y hay que estar definitivamente en la luna para imaginar que hubiese oficiales jóvenes dispuestos a aparecer abiertamente como insubordinados tan sólo para servir de coartada a un prófugo. Pero el asunto va más lejos. Porque lo que se sugiere es que esta era también una catapulta para que los hermanos Humala entraran a la política y se convirtieran con los años en candidatos militares con la consigna de llegar el poder para rescatar a los militares presos por actos de corrupción.

Cuando personas inteligentes y aparentemente serias siguen la agenda que les marca Chichi Valenzuela, hay que preocuparse, ciertamente. Encontrar lazos con generales montesinistas en quienes eran capitanes, mayores y comandantes en la década anterior, no debe ser muy difícil, porque todos trabajaban para el mismo ejército y como se sabe en esa institución uno no decide sus destinos. Podría hacerse el mismo ejercicio con todos los otros candidatos que provienen de los institutos armados y extenderlo a los empresarios que también sentían que el poder estaba vestido de uniforme.

Aquí, en un escenario en que se están definiendo propuestas de fondo en relación a la continuidad o corrección del modelo neoliberal, del tipo de trato que debe tener el Estado con el capital trasnacional, de la convocatoria a la Asamblea Constituyente para cambiar las reglas fujimoristas fijadas en 1993, la acusación a Humala como un Montesinos en piel de candidato, opera como un recurso de fuerza sumamente peligroso. Yo me pregunto qué deberíamos hacer si el tipo fuera realmente eso. No veo otra alternativa que enfrentarlo con todo, sacarlo de las elecciones, encarcelarlo, derrotar a sus seguidores. ¿Es eso lo que buscan Gustavo Gorriti, Valenzuela, Tafur, Mariátegui?

Entonces, ¿qué clase de demócratas son éstos que condenan a Humala por decir que el pueblo puede rebelarse a la derecha si mantiene el actual modelo, y son capaces por su lado de empujar a la ilegalización y persecución del candidato que lidera las encuestas?

09.04.06

1:20 a. m.  
Anonymous Anónimo dijo...

Ahora tenemos que elegir entre el Sida y el Cáncer gracias al Sr. Paniagua y demás ingenuos candidatos "pitufos" ¿Me imagino que los creadores-caviares de la pág. 3candidatos3 deben estar felices, no? Mi voto es VICIADO en el balotaje. Me parece que si el 30% vota viciado se anulan las elecciones, ojalá y lleguemos a ese porcentaje. El Perú se merece más que ese par de tipejos.

4:43 a. m.  
Anonymous Anónimo dijo...

Lo siento mucho, como siempre, es mi culpa...

9:39 a. m.  
Blogger Herr Hauptmann dijo...

Me temo que decir que con el voto extranjero va a superar a Alan es lo mismo que cuando dicen que la selección peruana, matemáticamente tiene posibilidades de clasificar al mundial.

10:02 a. m.  
Anonymous Anónimo dijo...

con unos buenos retrovirales...prefiero el sida al cancer....

4:11 p. m.  
Anonymous Anónimo dijo...

Veo lo clasico, el que no gana patea el tablero y a empezar de nuevo. A eso sumamos que en vez de hacer un MEA CULPA y ver en que fallaron para no volver a cometer el mismo error (aparte de ningunear a todos los de las zonas rurales y maldecir que tengan voz y voto y que lo hagan valer, y soñar con que los que huyeron del pais y que NO VIVEN lo que la gran mayoria de nosotros vivimos salven a ese tercio del pais que prefiere que las cosas sigan como estan, es decir, mucho para ellos y poco para los demas). En ese caso los apristas son mas inteligentes que aquellos que se dan golpes de pecho por la democracia y que siempre votaran por aquella derecha que les da migajas, ya que ellos si mesuran su mensaje (claro, los dirigentes porque los demas estan para dar por lo bajo, hasta en eso son mas organizados) y hacen un analisis profundo de su estrategia cuando falla. Ya escucho tambien hablar solapadamente de fraude de parte de algunos dirigentes de UN. Lamentable el espectaculo ultimo que dan en su agonia.

6:47 p. m.  
Anonymous Anónimo dijo...

Si Apoyo y transparencia pueden hacer una proyección basandose en lo que dicen unos cuantos miles de actas, imaginense lo que puede hacerse conociendo el resultado de casi 77000 actas.

Haciendo una proyeccion al 100% departamento por departamento y extranjero incluido, al final el Apra ganará por 42,000 + - 500 votos, en porcentajes esto es 23.89 vs 23.56 de UN, con un margen de error de 0.01%

Bien haría Lourdes en aceptar de una vez su derrota.

4:23 p. m.  

Publicar un comentario

Suscribirse a Comentarios de la entrada [Atom]

<< Página Principal